La vida nos cambia por completo cuando perdemos a un ser tremendamente querido. Y más aún si hablamos de una relación amorosa que ha marcado por completo nuestra vida.  Este es el caso de Gabriella Kingston, y una de las ‘royals’ más desconocidas, que, un año después de la trágica y más que dolorosa muerte de su marido, Thomas Kingston, ha reconfigurado su vida por completo para adaptarse a esta nueva situación.

Sabemos que la familia real británica es extensísima, una organización muy numerosas, con muchísimas vinculaciones y conexiones aunque no todos formen parte activa de la corona. A principios del pasado año una noticia revolucionó la prensa rosa británica al conocerse que el marido de Lady Gabriella Windsor, prima segunda del rey Carlos III de Inglaterra, había decidido acabar con su vida con 45 años.

El shock fue palpable no solamente para la propia aristócrata, sino por toda la familia Windsor, que quiso consolar y apoyar a la viuda en todo momento. La británica actualmente solo tiene 43 años y es el momento de afrontar esta nueva etapa y superar el duelo de esta trágica noticia. ¿Cómo ha sido este traumático año para la periodista y cómo está iniciando su nueva vida?

UN ADIÓS INESPERADO

Las investigaciones realizadas por El Tribunal Forense de Gloucestershire sobre la muerte inesperada y repentina de Thomas Kingston revelaron un dato claro y clave: se produjo una herida traumática en la cabeza debido a “impulso repentino” que el propio falleció provocó para acabar con su vida debido a “efecto adverso en la medicación recetada”, que se trataba de antidepresivos. Ella misma comunicó esta causa en la revista Hello. La inesperada pérdida cambió por completo la vida de Lady Gabriella Windsor, sumiéndose en una tremenda tristeza.

“Tom era un hombre excepcional que iluminó las vidas de todo aquel que le conoció. Su muerte ha producido un enorme impacto en toda la familia y pedimos respetar nuestra privacidad mientras pasamos el duelo”, comunicó el propio Palacio de Buckingham en una amorosa nota de despedida del aristócrata. Ahora, un año después de su pérdida, que se produjo un día como hoy, pero en febrero de 2024, su viuda tiene que afrontar una nueva etapa vital.

CAMBIOS DE CASA Y DE ENTORNO

La primera decisión que tomó la inglesa fue cambiar el escenario y abandonar la casa familiar. Aunque el trágico incidente no se había producido en la casa que el matrimonio compartía, sino en casa de los padres del empresario, lo cierto es que no cabe duda de que todo lo que se encontraba en el hogar común le recordaba a su difunto marido y lo principal era intentar poner distancia por medio con este complicado drama.

Para pasar el duelo y no sentirse sola, la ‘royal’ se trasladó a residir a casa de sus padres, los príncipes Michael de Kent. Se mudó con ellos al recinto de Kensington Palace, donde se encuentran diversas construcciones y casas convertidas en residencias independientes que acogen a diferentes ‘royals’ de forma puntual o permanente en pleno centro de Londres.

Allí estaba siempre acompañada, con sus propios padres, o el resto de familiares, conocidos y amigos que se reúnen en la gran ciudad.  Ahora, cuando han pasado los suficientes meses, parece que la periodista habría empezado a recuperar su independencia, pero sin alejarse mucho, puesto que habría establecido su nueva residencia actual en un apartamento en la propia ciudad.

VOLVIENDO A LOS EVENTOS POCO A POCO

Cuando se cumple casi un año de aquel inesperado y trágico suceso que marcó un antes y un después en su vida, parece que Lady Gabriella Windsor comienza, poco a poco, a ver la luz al final del túnel. En este tiempo, ha afrontado un proceso de reconstrucción personal. Sin embargo, el camino no ha sido fácil, y ha requerido de mucho apoyo por parte de su familia y de su círculo más cercano, con los que ha conseguido ir volviendo a los compromisos poco a poco.

La aristócrata británica ha ido retomando poco a poco su presencia en actos y compromisos públicos. Uno de los primeros pasos fue su asistencia al emblemático desfile del Trooping the Colour, un evento de gran importancia en la agenda de la familia real, al que acudió principalmente por la insistencia y el apoyo de su tío, el rey Carlos III, quien ha estado especialmente pendiente de ella en estos últimos meses.

Más adelante, durante el verano, Lady Gabriella se dejó ver en Royal Ascot, la célebre carrera de caballos Su presencia en este exclusivo evento fue un claro indicio de que, aunque con cautela, estaba tratando de recuperar cierta normalidad en su vida social. También ha acompañado a sus padres en actos de carácter más institucional. Un ejemplo de ello fue su asistencia al nombramiento de Kyr Nktarje como el primer obispo de la Iglesia Ortodoxa Serbia en el Reino Unido.