Con el cierre de la tercera temporada de Una nueva vida, la actriz Beril Pozam, quien ha dado vida a la entrañable Suna, ha compartido un sincero y conmovedor mensaje de despedida que ha emocionado tanto a sus compañeros como al público que la ha seguido fielmente durante estos años.
“Durante estos tres años no solo rodábamos una serie, también compartíamos la vida”, confesó Beril en un testimonio que rebosa gratitud y emoción. Con estas palabras, la actriz ha dejado ver el fuerte lazo que la une al equipo con el que ha convivido en cada rodaje: “Lloramos juntos, reímos, nos ayudamos… incluso hubo veces que nos entendíamos sin necesidad de hablar. Cocinábamos los unos para los otros, quedábamos fuera del rodaje, nos apoyábamos”.
Pero su mensaje no fue solo para sus compañeros de reparto. La intérprete también tuvo un recuerdo muy especial y sentido para el público, ese que nunca falló a su cita semanal frente al televisor:
“Gracias por vernos, por seguirnos. Gracias a vosotros, esta aventura ha durado tres años. Por cada mensaje, por cada flor, por cada niño al que habéis alegrado en nuestro nombre, por cada animal que habéis adoptado… gracias de corazón”, escribió, visiblemente emocionada.
Beril también compartió que aún guarda “muchísimas fotos, vídeos y recuerdos” que todavía no ha sido capaz de publicar, simplemente porque la emoción le ha nublado las ideas. Sin embargo, prometió que lo hará pronto y se despidió, con los ojos llenos de lágrimas, con un sencillo pero poderoso: “Gracias”, acompañado de un pequeño adelanto de lo que será la despedida definitiva de la serie.
La complicidad con su compañera Afra Saraçoğlu (Seyran en la ficción) ha sido otro de los aspectos más celebrados por los seguidores. En redes, muchas de las imágenes que ambas han compartido juntas reflejan un cariño real que ha traspasado la pantalla.
El buen ambiente del rodaje, según la propia Beril, ha sido clave en la química que los espectadores han percibidoepisodio tras episodio. Y aunque la serie llega a su fin, el vínculo entre los actores y el público quedará intacto, como una de esas historias que se quedan grabadas para siempre en la memoria y en el corazón.