Ferit ha cometido un error tras otro. Por un lado, oculta el embarazo de Pelin, y por otro, ha sido pillado en unas fotos besándose con otra mujer. Las imágenes han llegado hasta Seyran y también a Kazim, que no ha tardado en cambiar de estrategia: ha dejado de confiar en su hija menor y ha decidido apostar por Suna como única esperanza para el futuro de la familia.

Pero Suna, lejos de acercarse a Seyran, ha dado un giro radical. Al sentirse menospreciada por su hermana, ha elegido confiar en Kaya y aferrarse a su boda, a pesar de que Seyran le ha advertido muchas veces que ese hombre oculta algo.

Mientras tanto, İfakat ha vuelto a demostrar su poder. Ha utilizado el compromiso de Suna con Kaya para hacerle daño a quien más dolía: Abidin. Ante la noticia, Abidin ha comprendido que ha perdido a la mujer que amaba.

Por si fuera poco, Ferit ha desafiado a Sehmuz en un tenso enfrentamiento. En un intento desesperado por poner orden, ha ido a verlo para exigirle que proteja a Pelin y al bebé. Pero el patriarca no ha aceptado el tono del nieto de Halis y ha respondido con una amenaza: “Te doy dos opciones: divorciarte y casarte con Pelin, o nunca volverás a ver a tu hijo. Si haces las cosas a tu manera… te quemaré vivo”.

Y todo esto ocurre mientras, entre las sombras, İfakat ejecuta su plan más malvado: expulsar a Seyran de la mansión y convertir a Suna en la nueva señora Korhan. “Hay un veneno escondido dentro de ella”, ha confesado, convencida de que su estrategia dará resultado.

Hace apenas unas semanas, la casa ya había temblado con otro escándalo: Kazim descubrió que Ferit y Sultan se acostaban en secreto. La criada fue echada sin contemplaciones y juró vengarse. Desde entonces, el equilibrio familiar no ha hecho más que romperse.

¿Podrá Seyran sobrevivir a tanta traición o será Suna quien acabe ocupando su lugar? No te pierdas los próximos capítulos de Una nueva vida. Cada domingo, a las 22.00 horas, en Antena 3.